EL TERREMOTO del día 31 de mayo de 1970. Alas 6 de la mañana los perros espesaron aullar, síntomas de mal agüero dirían, pero sería natural en la puerta de un cementerio, pero no era así, los animales no se juntarían para aullar en manada, ya que nunca lo habían hecho; las lechuzas no lo harían al mismo tiempo, quedando apostadas como esperando el amanecer.
La tierra empezó a temblar eran a las 3:30 de la tarde, me encontraba preparando mi material para desenvolverme en mi trabajo del día ..cuando primero se escuchó el viento, luego el ruido y la tierra se abrió, por mas que corría de un lado a otro; parecía que quería devorarme, los difuntos enterrados salieron de sus tumbas, cadáveres regados , nichos partidos, todo era un caos, corrí a buscar a mi familia pero ellos venían llorando a buscarme, nos abrazamos, era una eternidad, nos consolamos, cuando abrimos los ojos, era un caos cruces tiradas, cuerpos en estado descomposición, al intemperie los perros corrían a la gente que había venido a coronar estaban en estado de shock, algunos heridos,otros no se dejaban ayudar solo pensaban en su familia que habían dejado...los pabellones de san juan se partieron, las gradas, las oficinas todas su lunas rotas, los paredes de nichos que daban con mi cuarto de la guardiana, el eternit estaban rotos sobre mi cama... pensé en mi padre y agarré a mi mujer y nos fuimos a nuestra casa de la esperanza baja , cruzamos el cementerio y solo encontramos en el camino gente llorando, personas heridas, las casas de adobe caídas, mi techo en el suelo, ahí pernoctamos por miedo.
El día primero, empezamos a limpiar el campo santo a enterrar muertos que se estaban llenos de moscas, lo mismo ocurría en el cementerio del progreso, la gente ya no se preocupaba mas por sus casas, si no por sus difuntos que se sean levantados y enterrados como NN, empezamos a tapar los que estaban al interponer ese día 1 de junio por la inmensa necesidad de una vivienda segura, se corrió la voz que se invadiría los medanos que estaban entre el barrio san pedro y laderas del norte, que pertenecía a la corporación de sider peru, el día de 2 junio mi mujer y mucha gente del barrio de laderas, la esperanza, san pedro y otras zonas inmigraron a la pampa de estaba frente al cementerio Divino Maestro, levantaron sus esteras y pusieron su banderas y ahí se quedaron, luego de ese terrible suceso...muchas días después los familiares empezaron a trasladarlos a sus familias al cementerio general , los NN fueron enterrados en una fosa común que están en las pampas del cementerio; algunos que tuvieron mas suerte fueron a la cruz mayor, ahí están has el día de hoy, junto a los restos de los fallecidos de la tragedia de Cóndor Cerro.

Briguido Montoya Baca